Me encantan los animales en general aunque ahora soy más de gatos. Empece teniendo una gata blanca llamada Kitty y con unos ojos preciosos color azul cielo. La tenemos desde que era una cachorra, es increíble lo que me transmite; tanta paz y armonía, me recuerda al sentimiento de estar sola escuchando música clásica de Mozart, Beethoven, Bach, entre otros grandes compositores de la historia. Fumandome un cigarro de liar y viendo pasar el tiempo sin prisas, solo sintiendo la melodía del día. Esa paz que siento al verla dormir y que no se levante con ningún ruido. Hablando de gatos, hace unos meses vino una gata más hacernos compañía llamada Simba, me recuerda a un pequeño lince con sus rayas negras y grices; tiene unos preciosos ojos verdes. Es increíble verlas juntas todo el tiempo, como se limpian entre ellas y se cuidan ese pelaje tan bonito que tienen. Ese poder que tienen juntas, su complicidad cuando juegan o verlas durmiendo al mismo tiempo. Cada una tiene su carácter bien marcado y nadie puede con ellas cuando hacen travesuras, siempre juntas como arena y mar, como la Tierra y el sol. No existiría una sin la otra, no habría luz sin oscuridad, no existiría el amor sin haber conocido el odio antes...Veo la vida en sus ojos, veo la luz del día y veo también la oscuridad en sus ojos, me recuerdan a la noche acompañada de la luna. ¿Que sería de nosotros sin nuestros pequeños compañeros de vida? Esos pequeños animales como los llamamos que nos acompañan en las buenas y en las malas, que nos hacen la vida más feliz. Y que amamos tanto.
Kitty 🐱 y Simba 🐱